miércoles, 18 de septiembre de 2013

Ola ke ase, despertamos o que ase?


Imaginemos un país donde se prohibiese hablar mal de los gobernantes en las escuelas, donde los libros a utilizar tuviesen que pasar por la aprobación previa de la censura de los gobernantes, donde dentro del recinto escolar se legisle por ley cuales son los símbolos ideológicos permitidos (o que el que legisla entienda por ideológicos) donde un acto de protesta por parte de la comunidad educativa terminase con la elaboración de unas listas con nombres y apellidos de los que han protestado y enviada diligentemente al gobierno contra el que protestan.

Y ahora dejen de imaginar. No, no estamos en los años treinta europeos, ni en la antigua unión soviética, ni siquiera en la dictadura de aquel señor bajito que nos acompaño unos 40 años. Estamos en Baleares. Hoy. En democracia.

No es que se regule el temario, es que dentro de ese temario se regula el enfoque con que se explica el temario, las formas. Se prohíbe hablar mal de los políticos. Cosa que incluye cualquier tipo de crítica. Sólo queda pues, como posibilidad de disertación, la mera descripción de los hechos (siempre y cuando no dejen mal a los políticos ya que puede ser considerado como mal meter), sin opinión o la loa descarada, que no está prohibida, curiosamente.

Si se explica matemáticas, es fácil cumplir la ley. Si se da economía, filosofía, sociales etc. La cosa se complica. A no ser que queramos explicar las cosas sin contextualizarlas a la realidad social, cosa de difícil encaje en eso que se llama pedagogía.

Y esto se hace en un mundo, en un país en que es difícil saber contra quien gobiernan los políticos. Contra, no a favor.

Estamos en una realidad donde el presidente del gobierno, en campaña electoral acusa a Zapatero de subir los impuestos sin que estuviese en su programa electoral, que él no hace lo que no está en su programa electoral.

Rajoy, actual presidente por mayoría absoluta, prometió no subir los impuestos, y nos despertamos con el IVA al 21% y con subidas en el IRPF, prometió líneas rojas en los recortes, la sanidad publica libre y gratuita, las pensiones, la educación eran intocables.

Y nos despertamos con el señor Wert anunciando, sin wertgüenza, el aumento de un 20% en las becas para a continuación reconocer que pese a ese aumento unos 10.000 estudiantes se quedarán sin beca, pese a que otros lo cifran en 80.000. Todo ello sumado con los 600.000 alumnos que se quedarán sin ayudas para material escolar. Cosa aparte es que las becas se dividen en dos pagos siendo el primero garantizado y el segundo condicionado a disponibilidad presupuestaria. Es decir que a uno le conceden la beca, pero no es seguro que la cobre toda. Y todo esto bajo la delgada línea roja marcada en la campaña electoral.



Y nos despertamos con una subida de IVA al 21%, mientras guardamos las banderolas, las pancartas, las camisetas y los twiters en el lugar del olvido donde se almacena todos los argumentos de la campaña, en el rincón más oscuro.



Y nos despertamos con una privatización de la sanidad pública, regalando los modernísimos hospitales, inaugurados por Esperanza Aguirre, a las empresas privadas con full equipment. Los antiguos privatizadores, ahora en la empresa privada, los recogen con gusto. Se excluyen medicamentos de la seguridad social para que siga siendo gratuita, se excluyen beneficiarios para que siga siendo universal, y se privatiza para que siga siendo pública. Cumpliendo a rajatabla las líneas rojas que nos prometieron y por lo que les votamos (los españoles por mayoría), La justicia dice que no, que se paralice, pero a los politicos de turno, esos que respetan la ley y las decisiones judiciales, dicen que seguirán adelante con el proceso. Eso sí, con absoluto respeto a las decisiones judiciales.

Y nos despertamos con la buenísima noticia de que las pensiones siempre van a subir. Y no veas el alivio que nos dan. Pero unos días después, y tras leer la letra pequeña, resulta que lo único que hacen es darnos.

Resulta que acto seguido nos despertamos con la noticia de que la reforma de las pensiones, esa que no nos va a bajar la pensión nunca, hará que la pensión media se devalúe unos 1.500 euros anuales. Que el propio estado estima que subiéndonos la pensión por ley si o si se ahorrará 33.000 millones entre 2014 y 2022. Se dejarán de pagar 33.000 millones en pensiones y eso subiendo la pensión siempre. Magia. Sin saltarse las líneas rojas que nos prometieron y por las que tienen mayoría absoluta.

Y nos despertamos en un país con unos señores que quieren dejar de ser España, quieren dejar de formar parte de la tierra de los naseiros, filesas y bárcenas, por este orden. Cosa comprensible si no fuese por querer formar parte de los millets, itv-pujol, financiación ilegal de Unió etc. Mismo perros con distinto collar. (Dejando a un lado sentimientos nacionalistas, que como sentimientos son comprensibles) Claro que el resto de zonas no está muy diferente, Andalucía, Galicia, Valencia, Baleares....cada uno tiene lo suyo. Mismos perros.

Y miro este pueblo como se defiende del gobierno que legisla contra él, y veo como pelea en los tribunales, que anulan la privatización de la sanidad madrileña, el cierre de centros sanitarios en castilla la mancha, el cambio en la educación en Baleares....y veo como, con absoluto respeto a la justicia, se sigue adelante con todo ello, a golpe de decreto ley si hace falta.

Y veo como no se ve nada raro en mantener a un presidente del constitucional, con voto de calidad, afiliado al PP, y a jueces perseguidos por actuar contra el gobierno, con Garzón tumbado, Bermúdez apartado, Ruz cuestionado, Castro espiado y de los Cobos sentado tranquilamente en su sillón de presidente constitucional.

Y si me despierto del todo igual me da por pensar que el aparato de gobierno ejerce contra su pueblo, cambiando las leyes cuando los jueces, aplicando la ley, les tumban las medidas de gobierno, como en Portugal, donde el constitucional tumba la ley que permitía el despido de funcionarios, porque era contrario a la ley, porque era contra el pueblo. Y podría ver a Holanda, anunciando solemnemente el fin del estado del bienestar, un país con casi el doble de la renta per cápita de España. Y ahí empezamos a ver no sólo contra de quien se legisla, que también, sino a favor de quien.

Y veo satisfechas a las empresas adjudicatarias de la sanidad, y veo felices a los bancos rescatados que no han caído, y veo felices a las universidades privadas, y veo felices a los fondos de jubilación privados, y veo felices a las empresas que pueden contratar más barato y veo feliz a un gobierno que se ampara en su mayoría absoluta para disfrazarla de razón, aunque ya no vemos las líneas rojas por ningún lado de tanto traspasarlas, y aunque los que no pueden pagar los servicios de tan felices señores, no estén precisamente felices.

Por cierto, y aunque no tenga nada que ver, hoy me he despertado con la noticia de que Rato, sí, ese de Bankia, es fichado por el Santander. Y es que hay que saber ser agradecido.

Y yo que creía que había que enseñar a los niños a ser críticos, a saber pensar. Y creía que los políticos eran delegados del pueblo que los elige, a su servicio y sujetos a su evaluación, y creía que la democracia se ejercía continuamente, como prevé la constitución, y no sólo cada cuatro años. Y yo que creía que votábamos a un partido para que hiciese lo que dice que va a hacer.

Claro que todo eso me pasa por crédulo. 


PD: Agradecer un préstamo narrativo a Juan José Millás y su excelente  Sindiós, de 2012, vigente hoy con más fuerza.

5 comentarios:

  1. Y te despiertas en la Comunidad Valenciana y ves que donde antes había protestas por la infrafinanciación y el desprecio socialista ahora hay retiradas de reformas estatutarias, avaladas por la inmensa mayoría de Les Corts, que garantizan la financiación que llevan años pidiendo.

    Y donde antes había protestas por el "Aigua per a tots" y contra la insolidaridad de Bono e Iglesias, ahora hay agachamientos de cabeza ante Cospedal y Rudi (gobierno genuflexo, Ximo Puig dixit)

    Y ves un alcalde torrevejense que se denuncia a sí mismo para evitar un pleno.

    Y entonces te dan ganas de sacarte los ojos y dejar de ver.

    Muy buen artículo.

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  2. En la comunidad valenciana, con lo del metro y la no repetición del juicio, ya no es que se juega con el dinero, es que se juega con lo muertos. Se miente por encima de los muertos del metro y aquí no pasa nada. Aunque todo el mundo pudo ver la verdad después del programa Salvados. Otro ejemplo de contra quien se legisla.

    Gracias por pasear por esta plaza publica (de momento)

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  3. Gran artículo.
    En el debate electoral Rajoy le decía a Rubalcaba “Yo no soy como usted…Le subió el IVA a la gente y no lo llevaba en el programa…Yo, lo que no llevo en mi programa, NO LO HAGO” (Noviembre 2011).

    Saludos
    Mark de Zabaleta

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  4. Ese es el gran problema, que aquí no hay cultura democrática. Digo lo que quieren oír para conseguir el voto y, ya si eso, vemos si lo cumplimos o no; pero no dimitiré, porque la misión que me han encomendado los votantes, aunque sea para hacer cosas que dije que haré pero no haré y que dije que no haré pero haré, es más importante que el hecho insignificante de mentir a millones de personas.

    Además, hay mucho (pero mucho, mucho) votante "borrego" que no vota a favor de una idea sino en contra de otras. Aquello de la invasión de las hordas judeo-masónicas-marxistas de Franco todavía resuena en los colegios electorales.

    Y una reflexión respecto a la Comunidad Valenciana; no es que no haya cultura democrática, es que no hay democracia.
    No puedes tener un parlamento pendiente de decisiones judiciales. No puedes gobernar en contra de toda la comunidad educativa. No puedes recortar y recortar, no pagar a los libreros las ayudas del bonolibro de ¡¡¡2011!!! (ni 2012, obviamente) para luego pagarle 300.000€ a la selección de baloncesto por echar un partido en Castellón. No puedes asumir como pérdidas socializadas el desparrame de la F1 cuando dijeron, por activa y por pasiva, que no nos iba a costar ni un euro; pues un euro es lo que ha costado que la Generalitat se quede con Valmor, empresa gestora de la F1 en la CV y que tiene pérdidas por valor de 24 millones más lo ya inyectado desde las arcas públicas, que serán otros casi 40 millones. Y esto equivale a cero dimisiones por mala gestión de los recursos públicos, que no es que no sean de nadie, es que son de todos.

    Y un último caso sangrante; la privatización de la sanidad en determinadas zonas, el modelo Alzira, hace que sea la concesionaria la que contrate a los médicos; muchos de los médicos del Hospital de Torrevieja son extranjeros. Y eso no es un problema, porque convalidan sus títulos y todo genial y son súper competentes y lo que quieras, pero eso choca con el derecho a expresarme libremente en la lengua cooficial de la Comunidad. No le hables en valenciano a un médico de apellido Woshilowjcky porque no te va a entender. Con esto no quiero abrir un debate sobre el modelo lingüístico, porque de hecho no hablo una palabra de valenciano, pero como ejemplo de derechos pisoteados, vale.

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  5. El poder quiere a un pueblo ignorante e incapaz de ser crítico. Parece que el Partido Popular lo está consiguiendo más que cualquier otro partido que haya pasado por el poder. Un saludo, Adrián

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