Nike ha despedido a 300 trabajadores por revindicar
mejores relaciones laborales. 300!!!. Estamos de enhorabuena, y ya me explico.
Imaginen la legislación laboral que permite despedir a 300
trabajadores por protestar. Lógicamente la empresa ha dicho que no, que han
despedido a los que las autoridades han identificado en actitudes violentas
durante las escenas de huelga. Vaya por delante mis felicitaciones a las
fuerzas de seguridad de Camboya, capaces de identificar, sin lugar a dudas, a
300 personas en actitudes violentas. Por cierto, las actitudes violentas eran
contra los miembros de la policía en el exterior de la fábrica, esto añade aún
más mérito si cabe a este aguerrido cuerpo, capaz de recibir golpes, controlar,
la situación, disolver a los manifestantes y fichar a más de 300 en actitud
violenta, todo a la vez. Los mandos españoles ya están pensando hacer cursos en
Camboya.
Pero a lo que íbamos. Algo empieza a cambiar. Las empresas
multinacionales deslocalizaron su producción a países asiáticos, preferentemente,
por tres motivos, los bajos salarios, la habilidad y paciencia característica
de la población de la zona, y su sumisión al jefe, heredada por tradición y costumbre social. Mano
de obra hábil, barata y dócil.
Y así, de forma progresiva, pero sin prisa, la producción
industrial se fue trasladando de eso que llaman, desfasadamente, primer mundo
al tercero. La desaparición de un puesto de trabajo en la industria está
asociada a la pérdida de 3 en los demás sectores, por su efecto multiplicador,
con los efectos en paro y crecimiento consecuentes. De repente dejamos de ser
competitivos. En otros países se produce más barato, así que la solución era
bajar los salarios, es decir, acercarnos a nuestros competidores, en una suerte
de subasta de miseria, donde gana el que más bajo puede producir, el que acepta
más miseria, el que se doblega más, el más rastrero. Pero en un mundo
globalizado, con parabólicas en cada esquina, los asiáticos también quieren
acercarse, no quieren que el mundo se rebaje a ellos, saben que hay otro mundo
y también quieren alcanzarlo, así que piden mejoras salariales, y yo estoy muy
contento con ello. Eso significaría igualarnos en dignidad y no en miseria. En
un mundo globalizado, a largo plazo, no es factible fabricar en Camboya, donde
el salario mínimo es algo más que 50 dólares (37,40 euros), y vender una
zapatilla NIKE en otro país por 170,00 euros como las Zapatillas
Nike Air Max 90 iD -, al menos no es sostenible, ya que si la
producción se va a terceros países son salarios que se pierden aquí, es decir,
menos capacidad para comprar esas mismas zapatillas. Y si seguimos en esta
subasta de miseria, bajando salarios, a ver quien es el guapo que compra esas
zapatillas, ¿los directivos de NIKE?
Vale que me dirán que soy un exagerado, que los niveles
de precios en esos países hace que el salario sea bueno. Vale. Acérquense a las
imágenes que nos ofreció ese espectáculo dantesco de una fábrica textil
desplomándose en la ciudad de Phnom Penh,
que casualidad, Camboya, o anteriormente el derrumbe de una fábrica de
zapatos ubicada en la provincia de Kampong Speu de, sorpréndanse, Camboya. En
ambos casos la policía no identificaba a trabajadores en actitud de protesta
violenta, sólo identificaba heridos y muertos, otras de las muchas cualidades
de los cuerpos de seguridad camboyanos. Afortunadamente ninguno de ellos, ni heridos ni muertos, fue
despedido, tampoco se les vió protestar, ni a heridos ni a muertos.
No debe ser un salario muy bueno, cuando lo que se está
pidiendo es que se cubran los gastos de, lo que aquí llamamos seguridad social,
ni cuando a ninguno de los 5.000 trabajadores de la fábrica les da para salir
de pobres, aún con el nivel de precios del país. No hay clase media en Camboya
más allá de la testimonial, tampoco interesa. Interesan trabajadores buenos,
bonitos y baratos.
Y de las reivindicaciones? Que es lo que pedían los
violentos? Los trabajadores quieren que la empresa, que emplea a más de 5.000
personas en la planta, les pague 14 dólares (10,5 euros) más al mes para ayudar
a pagar el transporte, el alquiler y los costos de salud. Piden, además, un
salario mínimo de 74 dólares (55 euros). Está claro que una empresa como NIKE
no puede asumir, según sus precios de venta, 170,00 euros por zapatilla, o
60,00 la gama barata, unos desorbitados sueldos de 55euros al mes. Y si en
España queremos ser competitivos y que vuelva la industria ya sabemos lo que
hay que hacer, competir con camboyanos con sueldos mensuales de 37,00 euros al
mes y fábricas de estructura vacilante, es la ley del mercado amigo.
No es Nike quien vende zapatillas a 170€ en otros países. No hay que mezclar si se pretende aclarar.
ResponderEliminarEs cierto, son los minoristas, seguramente Nike vende al por mayor esas mismas zapatillas a 15 euros y los malvados minoristas lo suben hasta un 170, un 1.133% más. Ahora ya lo puedo entender, así ya se entiende que NIKE fabrique en paises con salarios de 37 euros al mes sin seguro médico y en fabricas de rodillas enclenques. Sin duda, esta explicación es mucho más lógica que lo que pone en el blog. Por aclarar.
ResponderEliminarNo es tan simple, y tu ironía no aclara nada. Pero si te sientes bien, tu conciencia disfrutará de un buen día.
ResponderEliminarEres muy generoso creyendo que esas zapatillas están fabricadas con salarios de 37€. Puede que sean menos. Nike, como otros muchos fabricantes, de los que tu eres consumidor, no son en lo más mínimo santos ni les preocupa mucho el dolor de la gente, de los que gana 37 o menos y los que pagan 170. Mírate los calzoncillos, posiblemente se confeccionen en esos mismos países. Que seas feliz.
Dejando a un lado mis gustos consumistas, que como son mios me los guardo para mi, me es totalmente indiferente que NIKE sean santos o demonios. NIKE es lo que la sociedad y la legislación les deja ser. Y en todo caso mi ironia, que evidentemente no aclara nada, queria dejar claro que aunque NIKE no venda a nivel minoritário en España, el márgen que tiene, lo tiene por pagar 37 euros al mes, que es lo que se cobra en Camboya. Evidentemente no es tan simple, pero no creo que me quepa un post para explicar las triquiñuelas de trasferencia de precios en lo que a fiscalidad internacional se refiere. Pero lo importante es saber que es eso de ser competitivos o porqué tenemos que ser competitivos o porqué ha habido una paulatina desindustrialización desde finales de los 70, y para todo eso es indiferente que NIKE venda directamente en España o no, ya que no cambia lo sustancial, de todas formas grácias por su interés, intentaré ser feliz, incluso después de mirarme los calzoncillos.
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